La tecnología

La tecnología toma una velocidad tan impresionante, que el hombre queda como un torpe animal, que no sabe aplicarla para sacar el mayor partido posible para todos, y como siempre aparecen los malditos intereses de esas grandes corporaciones que mueven el mundo y no de la forma más inteligente.

Cuando entenderá el mundo que el progreso cuando se presenta no se le puede dar la espalda pues sale demasiado caro a la humanidad. 

Como no comprender y trabajar, en la misma dirección que los progresos de la ciencia y la tecnología nos ofrecen, para hacer la vida del hombre mucho más fácil, porque empeñarnos en seguir sufriendo, si ya es posible evitar el dolor.

No hay una crisis de falta de trabajo, sino una crisis de no querer ver que el mundo ha de cambiar, si o si,  que si no logramos despertar, dormiremos para siempre.

Hay soluciones para todo, y mucho trabajo por hacer, hay que eliminar cualquier tipo de pesimismo, y terminar con la desidia, las envidias y la mala voluntad. 

El hombre ha de dejar de pensar con las vísceras, y utilizar la mente al 100%, todo cuanto nos hace vulnerables retrasa el progreso, y nuestras debilidades han de ser afrontadas con optimismo, y disfrutar visceralmente de todo aquello que hemos conseguido con nuestra mente. Y olvidar que el dolor a de ser el mínimo y solo lo positivo trae progreso y desarrollo. 

Hay mucho trabajo por hacer y muy pocas ideas, por culpa de los vicios y desidias.