Quien respeta a la naturaleza, tiene respeto por si mismo y por los demás.
Quien no respeta la naturaleza, no se respeta asimismo, nos encontramos con una persona sin formar, o simplemente enferma, de las dos maneras, ha de ser detectada, y puesta bajo control.
Si esto fuese una realidad, cuantos problemas podríamos resolver con esta decisión. Formar al que no sabe, y curar al que está enfermo, si detectamos estos problemas, y lo tomamos en serio, y dejamos de pensar, que hay gente mala por naturaleza, y si la hay, a de estar en la cárcel, lograríamos salvar este planeta, sacudido por la avaricia, el poder, y el odio.